domingo, octubre 28, 2007

Sobreviviré

Y, ¿qué más da que la vida corra y tú creas que estás parado cuando hay quien te demuestra que es mentira?Una mente en blanco puede hacerte dudar, pero, afortunadamente, muy afortunadamente, hay muchas personas alrededor que son un gran apoyo y un gran impulso.

Por eso hago mía una canción, una palabra, un himno y una consigna: Sobreviviré.

Creo que si Gloria Gaymour levantara la cabeza estaría orgullosa de mí, como yo lo estoy de vosotras, y me permitiría este descarado robo de una canción que siempre consiguió levantarme la moral y que dos personas maravillosas (para qué ocultarlo: paqui y jesús) hasta me consiguieron en portugués para que la gritara en todos los idiomas posibles.

Sobreviviré habla del desamor y el amor, pero, para mí, habla de que siempre me levantaré, las más de las veces, porque hay alguien (vosotras) que está ahí y me dice que solo hay que elevar el cuello, la cabeza y tirar para arriba.

Sobreviviré...

Porque hay amistad, y días azules tras la lluvia, y tormentas con rayos, truenos y centellas.

Sobreviviré...

Porque lo he hecho siempre y no he dejado que nada me pare ni me trabe en la lucha por alcanzar mi meta.

Sobreviviré...

Porque "al principio me asusté, estaba petrificada", pero ahora "tengo toda mi vida por vivir"...

... Firs time was afraid, I was petrified

Keep thinking I coudn't never lived without you by my side...

La llegada del otoño siempre me pone un poco melancólica. Los días son más cortos, empieza a refrescar y apetece meterse debajo de una manta. Este otoño, especialmente, me apetece retrotraerme, aislarme del mundo, quizás porque ya me siento un poco sola.

La verdad es que, desde el final de la carrera, me he pasado estos años dando saltos, cambiando de ciudad, y, sin embargo, es ahora cuando me estoy dando cuenta de lo que pierdo, cuando estoy sintiendo saudade, como dirían los portugueses. Hay quien traduce esa palabra por melancolía, pero, para los portugueses, es mucho más, es esa melancolía que enraiza en el alma y que tiene mareas como el mar que baña gran parte de Portugal y que les dio su época de esplendor con las colonias...Pues sí, siento saudade de vosotras, que estais ahí, a pesar de los mil kilómetros, y espero que mi casa (cuando de verdad sea mi casa y mire al mar, porque lo hará) se convierta en vuestro puerto de refugio en verano, invierno, primavera y otoño, para que tengais donde amarraros y yo os pueda sujetar, como vosotras me habéis sujetado tantas veces y seguís haciéndolo...

Entonces, no creo que sea tan independiente como parece (que lo mismo ni lo parece) porque prefiero depender de personas con las que puedo hablar un buen rato y echar unas risas y soltar unas lágrimas, a mirar a mi ombligo y olvidar que el resto existe.

Vosotras existías, y por mucho que mi felicidad (una parte) esté lejos de Sevilla, ya sabeis que mi corazón os tiene reservado un gran hueco que no se va a cerrar nunca. No disfrutaré de los sábados con vosotras, de las cenas en el vips, de las pelis en el Nervión... Pero sí las disfrutaré, aunque sea a través de un ordenador.

En el fondo, creo que me gusta el otoño...


Este texto lo he rescatado del blog que compartimos suntzu, amniotic y yo. Es del año 2006, si no recuerdo mal. Ahora estoy cerca, pero sigo pensando que sobreviviré una y otra vez.

15 comentarios:

Churru dijo...

Me alegro de que te vaya gustando el otoño. Pues claro que sí.

Shepperdsen dijo...

Y a seguir sobreviviendo.
Es verdad que el otoño despierta muchas cosas que están dormidas en verano, pero a pesar de todo, y a pesar de que se me moje la colada, me resfríe y salga del trabajo y ya sea noche cerrada, me sigue encantando.
Espero que este releer historias "rescatadas" sea para bien.

Regina dijo...

¿Ves? Si es que el otoño es una época maravillosa, aviva las sensaciones. Me alegro de que te sientas así y de que ahora veas las cosas de otra manera ;)

Nils dijo...

La verdad es que esa versión es mucho más animada que la de Mónica Naranjo jejeje Un besote!

anthonytowers dijo...

Yo tengo otra versión en plan salsa, además de la de Cake, lentita y guitarrera. Lo mismo un día te las paso, aunque poniendo sobreviviré en cualquier programa aparecen muchas versiones.
A mí el otoño me gusta, pues en verano estoy como zombie, y llega mi cumpleaños, que es como un nuevo comienzo. Lo de estar saudade me ha gustado, es un sentimiento que experimento muy a menudo y en el que me gusta mecerme.
Respecto a lo de aislarte del mundo, está bien hacerlo de vez en cuando, aunque sabes que intentaré evitarlo.

Nosotras mismas dijo...

A mi tb me gusta el otoño..., y las castañas.

Beoss.

Ana dijo...

Sabes que coincidimos en himno y en palabro(también la de M.Naranjo hasta el punto de desgallitarme cuando la necesidad de creerme la frase lo requiere :)).
En cuanto al otoño, probablemente, sea mi estación favorita por varios motivos: los colores, la sensación de casa, el recogimiento que siempre "produce algo", el silencio calentito de casa fresco de fuera, george winston de fondo, el sol que perdura ... ME ENCANTA porque además todavía hay algo de la anterior (temperatura, luz ...).

Igual tengo alma melancólica y casera ... por lo menos estos últimos años.
De todas formas lo guapo es "bailar" con cada estación, adaptarnos a cada una ellas, sacar lo mejor de cada, no te parece? Ya tendremos tiempo de solín y demás.
BS.

Anónimo dijo...

Actitudes positivas Arwen, hay que mirar positivamente y con sonrisa puesta a las cuatro estaciones, a las cincuenta y pico semanas del año, a los 365 días que coniene...
Siento envidia de esas "personas" a las que te refieres, porque tenerte de amiga ha de ser un privilegio... Por lo que leo aquí creo que eres una persona entrañable.
Un besito guapa! feliz día de fiesta!

Anónimo dijo...

Sobrevivir, el otoño, terminar etapas.

Leo que sigues llenando tu vida con cosas nueva y continuando tu camino de crecimiento, conociendo(-te).

Me ha gustado recordar ese momento que has rescatado.


"Todos los rincones de nuestra vida están impregnados de algo que dejaron los demás".

amniotic.-

Isabel Sira dijo...

Churru, ya ves, todo es cuestión de mirar las cosas con buena cara, y, aunque sinceramente estoy pasando una etapa un pelín dura y complicadilla, he decidido sonreirle a la vida, que lo que no mata, engorda y a mí me vienen bien los kilos ;).
Shepperdsen, efectivamente, sobrevivir siempre. A veces me gusta mirar atrás, porque recuerdo cosas perdidas y, además, me ayuda a mirar al frente con menos miedo, porque, si superé determinadas cosas ¿qué me va a impedir seguir haciéndolo? Ah, y cuídate de los resfriados de otoño, que pueden durar todo el invierno (seguro que Lisboa estará ahora preciosa).
Sagutxo, es que unaexcusa y tú me vais dejando miguitas que seguir en el camino...
Nils, y la parte que te toca ana, es que a mí Mónica Naranjo me pone un poco los pelos de punta, y no precisamente de gusto. Aunque os reconozco que también me desgañito como la que más, que descargan mucho sus canciones. Eso sí, la Gaynor forever...
Anthony, paso de buscar, mejor me las dejas ;P Eso sí, cuidado con la saudade, que puede embriagar demasiado y hacerte perder el norte. Y no hace falta que me recuerdes que llega tu cumple, lo tengo marcado en la agenda ;D
Nosotras mismas, apoyo lo de las castañas.
Ana, soy bastante hogareña también, aunque estoy en una época de movimiento y de cambios y necesito salir, a la vez que encontrarme conmigo a solas. La verdad es que está siendo un otoño un tanto 'extraño', por eso lo de que sobreviviré.
Cuánta razón tienes, cruzcampero. Y que sepas que, aunque no nos veamos, me puedes incluir entre tus amigos, que ya me parece que te conozco de toda la vida. No sé si soy entrañable, simplemente intento ser yo y que los demás se sientan a gusto siendo quienes son. Y la suerte es la mía, porque tengo amigos realmente especiales.
Amniotic, agradable sorpresa. Espero que hayas encontrado lo que buscabas y que sigas creciendo. Ya ves que a mí no me gusta parar, aunque si que me detenga a veces en cosas que siempre serán buenas...

Unknown dijo...

A mí también me gusta el Otoño, porque parece que vuelve a acentúar la necesidad de apreciar el hogar, pero al mismo tiempo todavía hay luz y oportunidad para dar paseos. Aquí la luz desde mediados de septiembre hasta mediados de octubre es quizá la más bonita del año. Me gusta dar paseos tranquilamente, y sentir las hojas secas bajo las suelas de mis zapatos...
Y la tarta de moras, y pasear recién anochecido por la zona vieja de Santiago, y llenarme los bolsillos de castañas asadas recién hechas...

Isabel Sira dijo...

Hacía tiempo que no vivía en Sevilla, pero este otoño también está teniendo una hermosa luz. Me has dado envidia, me gusta tu ciudad y para pasearla ahora me trae recuerdo totalmente literarios, no sé muy bien por qué.

Unknown dijo...

Porque la lluvia en sí es el fenómeno atmosférico más literario... Sobre todo la de septiembre o la de abril...

Luc, Tupp and Cool dijo...

Sí. Estoy segura de que sobrevivirás. Este año y los demás. En otoño parece que desaparecen los calores y los cobijos y todo se ve más solo y sin abrigo. Pero basta mirar un poquillo bajo la superficie para ver que las cosas siguen, sólo que se están adaptando para seguir viviendo. Disfruta de los colores, de la luz, de los paseos, de los frutos de temporada y, tú que te lo puedes permitir como experta deportista, de los riquísimos corolarios de la montanera otoñal, eso que en algunos sitios se llaman jabugos y en otros simplemente “ibéricos de bellota”.

Abrazos, Arwen-Undómiel.

Isabel Sira dijo...

En eso estamos Tuppence. Y lo del consejo de ibéricos, lo sigo seguro ;) Gracias.