viernes, noviembre 23, 2007

Liberación


Un día te despiertas y el peso se ha aligerado. No es que las mantas hayan caído al lado de la cama, es que el alma empieza a recuperarse por su imperativa necesidad de sentir más cosas que el pesar, la soledad, la tristeza, la pesadumbre de una vida que cambia hacia otra. Tampoco se trata de abandonarlo todo, pero sí de abandonarte en la marea que ha ido creciendo dentro de ti.

Soy feliz incluso cuando soy infeliz, porque vivo, y aprendo y crezco y siento y me quieren y quiero, aunque el amor sea eterno mientras dure. Ahora seré feliz de otra manera, y me duele mirar atrás, pero es un dolor suavizado por los dulces recuerdos que envuelve el pasado. Porque ha sido una partida que ha hecho daño, pero que ha sido cuidadosa para no romper más platos de los que ya cayeron, una y otra vez, mientras era un común y no un separados.

Crees que has aprendido la lección, pero también sabes que hay ciertas cosas contra las que tendrás que luchar para no repetir historias y batallas que te han llevado de nuevo a elegir la bifurcación del sendero, si bien esta vez has sido lo bastante ágil como para evitar que te vuelva a partir en dos.

Hay que ser cuidadoso, porque aprendemos demasiado bien quienes somos, pero estamos ciegos ante nuestro propio ser, de manera que nos creemos distintos simplemente por cambiar de interlocutor. Resta, pues, tomarme el tiempo necesario, corto o largo, para saborear una nueva existencia.

16 comentarios:

UnaExcusa dijo...

Me alegro de la liberación. Yo también me quiero liberar.

Isabel Sira dijo...

Gracias. Espero que el domingo hayas logrado, al menos, algo de paz.
Un besazo enorme guapa.

Isabel Sira dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Churru dijo...

Lo que me gusta de tus textos es lo fácilmente que los hago míos, a veces pones palabras a cosas que he sentido o siento. Un beso Arwen!

M. Jesús dijo...

Como bien dices lo importante es ser feliz, valorar el momento e intentar sentir, aprender y crecer con los errores. Ya que somos tan necios que no lo sabemos hacer con los aciertos.
Mantener en la memoria los errores o mejor dicho los no aciertos, mientras el Alzheimer nos lo permita, es lo m�s sensato de forma que en caso de que el camino se bifurque de nuevo tiremos de ellos para que nos gu�en. Aunque lo m�s dificil es saber ordenar esos errores (que tanto nos dolieron) dentro de nuestro alma para no confundir la realidad con los sentimientos o simplemente mezclar diferentes sentimientos.
Un beso

Unknown dijo...

que bien te expresas y que fácil lo pones....
coincido contigo en todo lo que dices en este post y sigue riéndote de todo, que la sonrisa es una de las cosas más contagiosas que existen...
besitosssss

Peritoni dijo...

Es una liberación porque has tenido la suerte (¿?) de estar en ese lado. Supongo que para la otra parte no será una liberación, o por lo menos no tan feliz.
Ahora ya está, mirar palante y a vivir que de verdad son dos días mal contados.

Isabel Sira dijo...

Churru, es que hay sentimientos universales, eso es todo. Y liberarse es bueno, incluso estando junto a alguien.
M.jesús, es verdad que nos cuesta aprender de los errores y de lo que no lo son, pero si al menos somos conscientes de ello es más fácil que sepamos aprender y rectificar.
Ex traño, supongo que te refieres a que pongo fácil enterderme, identificarte. Pues sí, la sonrisa la adopté hace años y casi nunca me la quito. Y ahora también añado la risa, porque si no me río de mis tristezas, me inundarían.
Peritoni, haces bien en poner las interrogaciones, no ha sido una suerte, ha sido difícil y pará mí mucho más largo, y sé que ahora estoy mejor que el otro lado, pero también sé que el otro lado estuvo bien muchas veces en las que yo no pude, y que se recuperará y será mucho más feliz, porque emperrarse no es bueno.

goldengate(d) dijo...

habrá más bifurcaciones en tu camino, seguro. qué importante es que hayas aprendido a no partirte en ellas...

besos enteros

Anónimo dijo...

"El sol limpia las calles,
la memoria, feroces pasiones atenúa.
Invéntate el final de cada historia
que el amor es eterno mientras dura"

I. Serrano.

Está claro que la llegada del día siguiente tiene un efecto terapeútico innegable

Isabel Sira dijo...

Goldengate(d), es que ya era hora que aprendiera... Aunque nunca se sabe...
Luis, ¡y yo que creía que la frase era mía! ;) El día siguiente son muchos días, en realidad.

Zitrone dijo...

... Me ha encantado. Y me he identificado.
Besicos de limón

Ana dijo...

Normalmente, lo que motiva nuestras decisiones (elegir sendero) está tan tan en el fondo nosotros, forma parte de nosotros de forma tan profunda, que el hecho de descubrir esos motivos nos puede costar varias decisiones "erróneas" o de elevado coste, sin ser necesariamente erróneas.
Ahora bien, cuando un día descubrimos esos motivos, cuando se enciende la bombilla al entender que en el fondo de esa decisión - que nos lleva a errores repetidos - había un miedo, un temor, una idea equivocada sobre nosotros mismos o sobre los demás, nos invade la sensación que describes en la primera fase: LIGEREZA Y RECUPERACIÓN DEL ALMA!.

Me encanta hacer esa labor de descubrimiento de los motivos propios aunque a veces resulte agotadora y cansina. Perserverancia.
Besosmil.

Isabel Sira dijo...

Alize, espero que no haya sido mucha la identificación, que la parte previa a la liberación fue dolorosa.
Ana, es curioso, no menciono nada de errores y muchos de vosotros habláis de ellos. En este caso no hablo de decisiones erróneas, aunque sí de batallas repetidas, pero no las quiero evitar por erróneas, sino por dolorosas y, ahora comprobado, inútiles. Pero tienes razón en lo de que nos mueven algunos motivos que tardamos en encontrar, incluso después de tomadas las decisiones.

Ana dijo...

La verdad que cuando hablo de errores estoy pensando, inspirada por tí, en los hechos - que en mi caso - se repiten erroneamente. También pensé que a lo mejor no era tu caso y por eso menciono "sin ser necesariamente erróneas".
Con independencia de como califiquemos los hechos o de lo que nos provoquen, lo importante es avanzar cada vez más liberadas y aligeradas, a pesar de la soledad, la tristeza o la pesadumbre.
Besosmil.

anthonytowers dijo...

Los lastres que nos atan se van soltando poco a poco, todo es cuestión de tiempo.